El cisne, milenaria y majestuosa ave que ha sido conocido por la humanidad a través de sus generaciones. Considerada una de las aves más hermosas, en la antigua Grecia fue consagrada al dios Apolo porque se creía que antes de morir cantaba melodiosamente. También recordaba al espíritu de la libertad misma, según Pitágoras y Platón era un alma que jamás muere y por eso producía un melodioso canto en la víspera de su muerte, el cual era simplemente su manera de vociferar la felicidad que tenía cuando al fin se liberaba de su cuerpo mortal.
Cuando hablamos de cisnes nos referimos al nombre común de varias aves anseriformes de la familia Anatidae (que tienen aspecto de pato). Son aves acuáticas generalmente de gran tamaño y la mayoría de las especies pertenecen al género Cygnus y por eso son vulgarmente llamados cisnes.
Características del cisne
Muchos conocemos el estilo característico que tienen los cisnes, un cuerpo regordete, con un cuello largo y estilizado, unas patas que evolucionaron según su naturaleza y forma de vida, es decir, son perfectas para estar en el agua y en la tierra. Son como unas pequeñas chapaletas que le sirven para desplazarse con exactitud en el agua, pero también le sirven para caminar en la tierra sin dificultad alguna.
Sus alas son largas y forman parte de su belleza, la cual se puede apreciar en toda su plenitud cuando estos vuelan en grupos, momento en el que probablemente estén emigrando para pasar el invierno.
La característica común del cisne es su distintivo y pulcro plumaje blanco, una de las razones por las cuales fue consagrado a la diosa venus, además de por su comportamiento bastante similar al de la diosa del deleite. Sin embargo, lo cierto es que no todos los cisnes son blancos, hay una especie endémica de Australia, el famoso cisne negro.
En la antigüedad se creía que solo habían cisnes blancos, por lo que cuando un grupo de barcos trajo entre su cargamento un grupo de cisnes negros, esto genero una gran polémica en la sociedad inglesa de aquel momento.
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Hábitat de los cisnes
Ya que hay varias especies las costumbres varían entre cada una, pero como factor común de todas las especies de cisnes habidas y por haber, podemos decir que: estos animales siempre viven cerca de grandes cuerpos acuáticos, grandes lagos, sobre todo aquellos que tengan una gran diversidad de alimento. Además emigran cuando llega el invierno y algunas especies también emigran a la hora de su reproducción.
Entre la variedad de sus especies podemos encontrar el cisne trompetero, que son aves de frío. Emigran a su zona reproductiva la cual se encuentra en la región sur de Alaska o a veces en las costas de Canadá.
En Asia se considera salvaje al cisne que emigra para su reproducción en el mar Caspio. En invierno las poblaciones de cisnes que viven en el norte se trasladan hacia el sur, pero ojo, no todas las especies emigran, en algunos lugares, las especies son sedentarias y se quedan todo el año en el mismo lugar.
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